¿COMO SABER SI TENGO DEPRESION?

Reconocer los síntomas de la depresión es a menudo una de las tareas más difíciles antes del tratamiento. Desafortunadamente, aproximadamente la mitad de las personas que los experimentan, nunca son diagnosticadas, evaluadas y tratadas.

Hay altibajos normales en la vida, todo el mundo se puede sentir triste en algún momento. Sin embargo, si los pensamientos negativos, la desgana o la falta de ganas de vivir dominan tu vida, puede que tengas depresión.

Estos síntomas pueden persistir por semanas o meses y ser suficientemente graves como para interferir en tu vida laboral, social y familiar.

Si te sientes con depresión, pide una cita con un profesional tan pronto como puedas. La depresión suele empeorar si no es tratada de forma adecuada y por la persona adecuada. Además, la falta de tratamiento puede llevar a otros trastornos de salud física y mental y a otros problemas en diferentes áreas de tu vida.

Si aún así no quieres acudir a un profesional que te de tratamiento, acude a un amigo, pareja o persona de confianza que te pueda apoyar. 

¿Cuáles son los síntomas de la depresión?

Vamos a clasificar estos síntomas en cuatro áreas para entenderlos mejor:

Comportamiento

• Incapacidad de concentrarse: la depresión afecta a la capacidad de pensar claramente, tomar decisiones, concentrarse o recordar cosas.  
• Incapacidad de disfrutar de actividades de ocio: falta de interés por hacer actividades que antes eran placenteras, como pasatiempos, deportes o relaciones íntimas. 
• Incapacidad de hacer actividades sencillas: incluso las actividades más sencillas parecen difíciles de completar o llevan mucho tiempo para terminarlas. 
• Aislamiento social.
• Caer en la adicción al alcohol o drogas: comportamientos de abuso de sustancias, apuestas, conducción imprudente o participar en actividades peligrosas.
• No salir del hogar.

Sentimientos

• Culpabilidad: tomar la responsabilidad de algún error o del hecho de no ser feliz o productivo.
• Frustración.
• Indecisión.
• Ansiedad: a menudo la ansiedad acompaña a la depresión. En el caso de un cuadro de depresión con ansiedad, el estado de tensión puede perdurar bastante tiempo.
• Tristeza: uno de los síntomas más comunes de la depresión es los constantes sentimientos de tristeza. Puede que también te sientas apático o vacío. 
• Pesimismo: no ver salida a la solución y perder la esperanza de cualquier mejora posible.
• Baja autoestima.
• Irritabilidad: sentirse agitado, sin descanso o violento. El nivel de tolerancia es bajo y todo el mundo es molesto o poner nervioso. 

Pensamientos

Suelen aparecer pensamientos negativos o irracionales como:

• “No sirvo para nada”.
• “Nada puede mejorar”.
• “Mi vida es un desastre”.
• “Nadie me quiere”.
• “Soy un desgraciado”.

Físico

• Falta de energía: sentirse cansado constantemente, con fatiga. El cuerpo se siente pesado.
• Dolores frecuentes: la tensión y fatiga de la depresión se manifiestan a menudo como síntomas físicos como dolores inexplicables sin causa física, quejas frecuentes, dolores de espalda, de músculos y de estómago. Es posible que estos síntomas indiquen otra condición física, por tanto es necesario asegurarse de consultar a un médico. 
• Cambios de apetito: puede que se sienta falta de interés en comer porque la comida no tenga sabor, por ansiedad alta o simplemente por falta de energía. 
• Problemas de sueño: insomnio, despertarse muy temprano o dormir demasiado.

Síntomas alarmantes de la depresión

Estos síntomas y signos pueden estar relacionados con el suicidio y por tanto es urgente que se tomen medidas; ponerse en contacto con profesionales sanitarios.

• Hablar constantemente sobre la muerte.
• Cambios repentinos de humor; desde estar muy triste a estar muy calmado.
• Poner los asuntos en orden; resolver problemas, testamentos…
• Comentarios como “ya no quiero vivir más”, “no sirvo para nada”.
• Depresión clínica: pérdida de interés, tristeza profunda, problemas de nutrición y sueño.
• Comportamientos que conllevan riesgos y que puedan acercar a la muerte.
• Perder interés en cosas que solían interesar.
• Hablar sobre el suicidio.